Acompañada de una gestión planificada y profesional, son muchos los beneficios que una pequeña empresa puede obtener de su presencia en redes sociales. Decir que las redes sociales se han universalizado y que en todo negocio lo más importante son los clientes, sería algo demasiado “abstracto”.

Vamos a “concretar” por qué tu pequeña empresa debe estar en redes sociales. He aquí algunos de, en nuestra opinión, los principales motivos:

  1. Mayor visibilidad. Según datos del Observatorio de Redes Sociales elaborado por The Cocktail Analysis, un 90% de los internautas españoles tiene al menos una cuenta activa en alguna de las principales redes sociales (Facebook, Tuenti, Twitter, Google+, LinkedIn, Instagram, Pinterest). De media, cada usuario tiene 2,3 cuentas activas. No solo te verán tus clientes actuales, sino que podrás llegar a futuros clientes potenciales.
  2. Visitas a la web. Las redes sociales generan tráfico a tu web. Consigues poner información sobre tu negocio al alcance de más personas. Aumenta tus posibilidades de darte a conocer e incrementar las ventas.
  3. Credibilidad. Tener un perfil en redes sociales ayuda a humanizar la marca. Hablar el mismo idioma que tu público, interesarte por sus inquietudes, preocuparte por conocer sus predilecciones… Bien gestionado esto se traduce en credibilidad y confianza.
  4. Estrechar lazos con seguidores y posibles clientes. Las redes sociales son una poderosa herramienta de comunicación personal. Podrás dialogar directamente con tus clientes y, lo que es más importante: escucharles. Responder en abierto a sus comentarios transmite confianza, cercanía, compromiso, transparencia y honestidad.
  5. Conocer mejor a tu público. Conocerás las necesidades de tus clientes de primera mano, lo que les gusta y lo que no, lo que buscan, lo que esperan,… Las redes sociales te ayudarán a conocerlos mejor y, a partir de ahí, redefinir tu estrategia de mercado. Dos de cada tres usuarios de redes sociales siguen a marcas en estos medios. De ellos, cuatro de cada 10 lo hacen de forma activa: comentando, compartiendo, participando en sus iniciativas…
  6. Disponer de un canal de comunicación propio. Son la plataforma perfecta no solo para dar información sobre los productos, ofrecer promociones o descuentos, presentar novedades u organizar concursos; sino también para ofrecer contenido no comercial que aporte valor a tu público. Su difusión, según The Cocktail Analysis, favorece la construcción de atributos de esfuerzo, innovación y calidad.
  7. Atención al cliente. Nos permite estar informados en todo momento de qué se dice de nuestra marca y enterarnos al momento de posibles incidencias, quejas, problemas,… Podremos solucionarlas antes de que se conviertan en una “crisis”. Y, además, la eficacia y la eficiencia con la que las atendamos, mejorará nuestra imagen de marca y favorecerá nuestra reputación online.
  8. Feedback y retroalimentación constante. Lo que se dice y no se dice de nosotros en las redes sociales nos ofrece una información de incalculable valor que nos ayudará en la mejora continua de nuestro negocio.